Todo empieza con la decisión de tener un hijo y cuando se confirma la buena nueva de que vais a ser padres.
Durante el embarazo se producen muchos cambios: la mujer está mucho más sensible, desde los olores a las emociones, el físico se modifica, comienza a plantearse la crianza… En general, surgen dudas y hay muchas decisiones nuevas que tomar, por lo que tener una buena comunicación con tu pareja es esencial: hablar, compartir dudas, miedos, alegrías…
Hoy en día, muchas mujeres buscan actividades para gestionar estas emociones: hacen yoga, natación, pasean… Compartir alguna actividad puede ser enriquecedor y un buen acompañamiento para la futura mamá. Por ejemplo, practicar juntos los ejercicios de respiración que enseñan en las clases de yoga, salir a pasear sin prisas sintiendo así la presencia del bebé y disfrutando de la nueva familia que estáis formando, etc., son algunos ejemplos que os pueden servir de guía.
Los cambios físicos y emocionales en la mujer durante la gestación son evidentes, pero el papá también vive cambios y hay que darles la importancia que merecen: pasa de ser hombre, hijo, amigo, marido… a una nueva etapa muy importante: ser papá, con nuevas responsabilidades, retos y con un nuevo orden de prioridades vitales.
El escuchar el embarazo y sentir que el bebé ya está entre vosotros, os facilitará su integración en vuestra nueva vida ayudándoos a comprender mejor esta nueva etapa.
Como ya sabes, el bebé escucha desde el vientre materno por eso hablarle es importante. Además, la voz de papá es más grave, puede llegar al bebé con mayor facilidad. Esto se hace visible cuando nace, porque los bebés escuchan y reconocen la voz de papá, que les calma y les da seguridad.
El parto es un momento inolvidable. ¡Es cuando nace vuestro hijo! Informaos juntos, acudid a los cursos prenatales que ofrece vuestra matrona y aprovechad para andar juntos el camino de la crianza que empieza en el vientre materno.
El día del parto, la mamá te necesita; cada mujer, a su manera, pero es importante que ese día tú también te cuides, papá. Tienes que mantenerte bien hidratado, recordar comer cada dos o tres horas y es mejor que lleves ropa cómoda. Intenta estar relajado y tranquilo, confiando en tu mujer y en el proceso que está viviendo.
En el posparto sigue siendo muy necesario tu apoyo. Tener información básica sobre la lactancia materna te ayudará a comprender a tu mujer y a darle ánimos y, si es necesario porque surge algún problema, acudir a un experto para buscar juntos la solución. La lactancia es instintiva pero también es una técnica que hay que aprender, si comprendes esto será más fácil que no tires la toalla y encontréis juntos las soluciones.
Acompañar es escuchar al otro, respetar sus decisiones y para que eso suceda, también tienes que escucharte a ti mismo y respetarte. Compartir con tu pareja dudas y alegrías puede ser una buena forma.