Que levante la mano quien nunca haya jugado a las cocinitas. ¿Nadie? Normal, es un juguete de toda la vida. Y súper divertido. Si a eso le añadimos que ser cocinero está de moda… tenemos la combinación perfecta para que os chifle el tutorial que os traemos hoy de la mano de Bezoya. ¡Una cocinita DIY y 100×100 reciclada!
Materiales que necesitamos para nuestra cocinita sostenible:
Venga, manos a la masa. Apunta todos los materiales que vamos a necesitar para hacer esta manualidad:
- Botellas de agua Bezoya de distintos tamaños
- Tijeras
- Cúter
- Pinturas acrílicas de tus colores favoritos
- Pincel
- Palos de helado
- Troqueladora
- Pegamento
¡Sigue paso a paso cómo hacer tu cocinita!
Vamos a empezar por crear nuestros fogones, que si no… ¡malamente vamos a cocinar nada! Cortamos las bases de botellas de distintos tamaños.
Y las pintamos, al más puro estilo vitrocerámica. Si los pintas por dentro, tendrás unos fogones brillantes y relucientes! Y si lo haces por fuera quedará un mate muy chulo.
Tan importante como los fuegos, es tener una buena batería de cocina. Así que vamos a ello, ¡a por nuestra olla exprés! Para ello vamos a cortar una botella a la altura que nos interese. Todo dependerá de lo profunda que queramos que sea. Y la pintamos.
Para hacer la tapa, hemos cortado la base de una botella grande, de manera que nos quede un círculo plano. Si lo prefieres puedes crear tu tapa con la base de la botella cortada como hemos hecho para nuestros fogones y así tendrá un poco de profundidad. ¡A tu gusto! Para rematar, hemos pintado un tapón de negro y con un poco de pegamento lo hemos colocado en la parte superior de nuestra tapa.
Con un palo de helado cortado por la mitad puedes hacer el mango de la olla. Con ayuda de los papis, se hace una pequeña hendidura con un cúter en un lateral de nuestro recipiente y se introduce el palo. Fíjate, en la foto siguiente puedes encontrar una sartén y una cazuela hechas con la misma técnica que hemos seguido para la olla.
Siguiendo con los utensilios de cocina, vamos a hacernos una espumadera genial. Cortamos la base de una botella, de manera que quede un círculo plano, como en el caso de la tapa de la olla.
Con una troqueladora, perforamos toda la superficie y pintamos. Con un poco de pegamento incorporamos el mango de la espumadera… ¡Y a freír huevos!
Y ya tenemos lista nuestra cocinita ¿Has visto qué chulada? ¡Puedes hacer todas las piezas que se te ocurran! ¡Es genial! Os vamos a dar algunos ejemplos para completar vuestro kit, como un copa de vino, un salero y pimentero… e incluso una vajilla.
Los mejores manjares hechos con un poquito de goma eva y…¡A comer!. Seguro que los peques lo pasan genial, y vosotros podéis participar con ellos en este juego en el que aprenderán mucho.
Si te interesa conocer más manualidades de Bezoya y de El Tarro de Ideas puedes visitar nuestro blog, y descubrir nuestro contenido.