La alimentación complementaria es el proceso por el cual se ofrecen al lactante agua y nuevos alimentos (ya sean líquidos, triturados o sólidos) distintos de la leche (materna o artificial) como complemento y no como sustitución. Y es que la leche sigue cubriendo la mayor parte de las necesidades energéticas de los lactantes. Así que no hay que pensar que al introducir la alimentación complementaria se sustituyen tomas por comidas, puesto que la lactancia sigue siendo a demanda.
Realmente no hay motivos para iniciar la alimentación complementaria antes de los 6 meses. Hasta entonces, el bebé solo se alimenta de leche (materna o artificial). A partir de los 6 meses nos podemos plantear iniciar otros alimentos. Y… ¿Cuándo? ¿el día en el que cumple 6 meses exactos? Pues no funciona exactamente así, puesto que hay que esperar a que el bebé esté preparado para empezar a comer otros alimentos, a parte de la leche.
¿Cuándo está preparado mi bebé para la alimentación complementaria?
Hay diferentes signos que indican que el bebé puede estar preparado para empezar la alimentación complementaria:
- Realiza una buena coordinación ojo-mano-boca
- Se mantiene sentado con mínimo apoyo
- Muestra interés activo por los alimentos
- Ha desaparecido el reflejo de extrusión
Si estos criterios se cumplen, es más que probable que tu bebé esté listo para empezar a tomar alimentos distintos a la leche. No obstante, no hemos de obsesionarnos y conviene respetar sus ritmos, fomentar su autonomía, no presionar ni forzar, respetar su hambre y saciedad, intentar no fijar cantidades, crear rutinas y cuidar el ambiente emocional.
¿Con qué alimentos comenzar la alimentación complementaria?
Otra de las grandes preguntas es… ¿Cómo se introducen? ¿Sólidos, triturados? Principalmente existen 3 maneas de comenzar en función de la textura en la que ofrecemos los alimentos:
- Alimentación mediante triturados: De esta forma ofrecemos diferentes tipos de texturas de purés al inicio. Más adelante se introducen los sólidos.
- Alimentación con sólidos o BLW – “Baby Led Weaning”: Con este método se ofrecen alimentos sólidos adaptados en forma y textura para que el bebé pueda comer “ a su ritmo” y de forma autónoma.
- Alimentación Mixta: en este caso, combinaremos ambas (sólidos y triturados).
Y recuerda que los bebés comen porque están creciendo y porque tienen hambre… ¡pero no se les puede “obligar” a comer! Si ves que: escupe la comida, se echa hacia detrás, cierra la boca, quiere irse de la trona, ignora los alimentos, llora o tira la comida al suelo… Probablemente sea su forma de decirte que “ya no tiene más hambre”. No desesperes, poco a poco irá comiendo más (recuerda que su alimento principal sigue siendo la leche).