Llevar a tu bebé cerca de tu cuerpo tiene muchos beneficios, tanto para tu bebé como para ti, papá o mamá (1). Al sentirte cerca, escuchando el latido de tu corazón, el bebé se siente protegido, llora menos, duerme mejor e incluso se reduce el riesgo de sufrir cólicos del lactante (2). Para ti, el hecho de mantener una cercanía con tu hijo, te ayuda a atender antes sus necesidades, favorece la lactancia materna e incluso se ha demostrado que se segregan endorfinas u hormonas del bienestar (3).
Pero además, al utilizar un portabebé ergonómico, ayudamos a proteger las espalda del adulto y del bebé. Si decidimos recurrir a una mochila u otro tipo de portabebé, es importante vigilar la forma en que colocamos al bebé, para proteger su frágil columna, y la del adulto que lo transporta. El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid recomienda el uso del porteo ergonómico a la hora de llevar a nuestros hijos cerca (4).
Pero ¿qué significa porteo ergonómico?
Transportar al bebé de forma ergonómica es hacerlo respetando su posición fisiológica, o lo que es lo mismo, lo que en el argot del porteo se llama “posición de ranita”, y que se caracteriza por los siguientes puntos:
- Espalda del bebé en forma de “C”, vigilando que la tela del portabebé dé un buen soporte en todos los puntos de la espalda del bebé.
- Piernas en forma de “M”, quedando las rodillas más altas que las caderas, y las piernas separadas entre sí en un ángulo de 90º. Para ello, el asiento que forma la tela del portabebé debe mantener el culete y las rodillas del bebé en una buena posición y proporcionar una buena sujeción. En esta posición, las caderas (inestables todavía en los primeros meses de vida), se colocan en una posición óptima para un buen desarrollo
- Cabeza cubierta si todavía no mantiene su cabeza o si está dormido.
Sin embargo, el que un portabebé sea ergonómico no lo es todo, sino que hay que utilizarlo adecuadamente. Para respetar la posición fisiológica, el bebé debe ir siempre mirando hacia nosotros, ya sea en la parte delantera de nuestro cuerpo, en nuestra cadera o en la espalda. Está totalmente contraindicado colocar al bebé mirando hacia delante, ya que esto obligaría a su columna a adoptar una posición de C invertida, además de aumentar su nivel de estimulación, sin que esté preparado para protegerse de ello.
La altura a la que lo colocamos es también importante. Si lo llevamos delante o en la cadera, tenemos que ser capaces de dar un beso en su cabeza, simplemente inclinando nuestra cabeza hacia abajo. Si el bebé va en la espalda, la altura a la que lo colocamos dependerá de su edad, y de si va despierto y queremos que pueda ver el entorno por encima de nuestro hombro, o si va dormido y necesitamos que apoye la cabeza en nuestra espalda.
¿Cómo protege el porteo ergonómico nuestras espaldas?
La posición en forma de C (posición fetal) favorece la formación de la curva dorsal, que es la primera de las curvas en formarse en la espalda. Posteriormente se forma la curva cervical, cuando el bebé es capaz de mantener la cabeza, y por último la curva lumbar (5). Para evitar dolores de espalda a edades tempranas, es importante mantener la flexibilidad y la capacidad de colocarse en posición fetal.
Además, el movimiento continuo al que se adapta el bebé cuando va pegado a nosotros, es un estímulo para su equilibrio que hace que empiece a trabajar la musculatura “buena” (es decir, musculatura profunda de la espalda), y que en un futuro le permitirá adoptar una posición erguida y protegerá de dolores de espalda (1).
Por último, para el adulto, un portabebé ergonómico permite repartir el peso del bebé en nuestro tronco, y no sobrecargar nuestro cuello y hombros, que es lo que ocurre cuando cogemos a nuestros bebés durante mucho tiempo sin ayuda de un portabebé. Para comprobar esto, podemos hacer un sencillo ejercicio que consiste en coger a nuestro bebé en brazos, pedir a otra persona que nos haga una foto de perfil. A continuación colocar a nuestro bebé en un portabebé ergonómico y pedir una nueva foto de perfil. Compara la posición de tu espalda con y sin portabebés, seguro que los resultados te sorprenderán.
Fuentes:
(1) Beneficios del uso del portabebés. Hacer Familia, en colaboración con el Colegio Profesional de la Comunidad de Madrid. http://m.youtube.com/watch?v=Qt_PV09kwuc
(2)Increased carrying reduces infant crying: a randomized controlled trial. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/3517799?dopt=Abstract
(3)Cógeme Mamá: Qué pedirle a buen portabebés: http://redcanguro.files.wordpress.com/2010/03/portabebes_tbb203_redcanguro.pdf
(4)Los fisioterapeutas recomiendan el portabebés frente al carrito para transportar a los niños. https://www.cfisiomad.org/Pages/detalle_notaprensa_pub.aspx?idnota=67&BackRedirect=https://www.cfisiomad.org/Pages/camp_comunicacion.aspx
(5) Estructuración psico-corporal en el niño, visto desde la óptica del método G.D.S. http://www.apgds.com/sites/apgds/pages/medias/documents/articlei–11.pdf