Convertirse en abuela supone un acontecimiento muy especial para la vida de una mujer. No se trata de volver a ser madre tras el paso de los años, sino de adoptar un papel tan distinto como importante. De hecho, los abuelos siempre son una pieza clave en todas las familias, esenciales por el apoyo incondicional que muestran a aquellos hijos que recientemente han tenido un bebé.
Las abuelas primerizas pasan por un momento irrepetible en sus vidas, el momento en el que se les comunica que un nuevo miembro en la familia está por llegar. Puede que te lleves la sorpresa en forma de regalo o en una tarjeta con un mensaje que te dejará un poco descolocada. Pero, sí, ¡vas a ser abuela! Puede que la emoción inunde tus ojos o, tal vez, no sepas cómo reaccionar en un principio. Sea como fuere, estás dejando atrás la fase de ser madre para emprender una nueva y emocionante aventura.
Tus años como madre nunca finalizarán porque aunque tu hija o hijo te conviertan en abuela, ellos no dejarán de necesitar nunca tu sabiduría de vida. Además, las abuelas de hoy no son como las de antaño. Son más activas y más vivas, capaces de contribuir exitosamente al equilibrio familiar. Sin embargo, ¿cuál ha de ser tu papel como abuela?
La clave está en no sobrepasar los límites. A fin de cuentas, una abuela es una mujer con la licenciatura de madre. La mejor maestra para los padres novatos, así como para sus hijos. Podrás ayudar y aconsejar. Tu niet@ aprenderá de ti tanto como tú de él. Déjate llevar por la experiencia y disfruta de tu nueva categoría de abuela. Pronto te sorprenderás hablando de tu niet@ con tus amigas, de lo guapo que es y de lo feliz que eres en tu nuevo lugar en la familia.
Bebé a Bordo