La natación para bebés es una actividad lúdica, estimulante y afectiva que podemos realizar con nuestros peques (esta actividad siempre debe realizarse con supervisión de un especialista y donde exista servicio de socorrismo).
El agua juega un papel fundamental en la vida de todo ser humano, los bebés se encuentran sumergidos en líquido amniótico del útero materno durante toda su gestación, por lo que éstos conservan una serie de reflejos que facilitan la adaptación al medio acuático y pueden sentirse confortados y disfrutar durante los primeros meses de vida.
La edad recomendada para comenzar con esta actividad es en edades tempranas. A partir de los tres meses, el sistema inmunológico del bebé comienza a madurar, previniendo las posibles infecciones de oído y resfriados; siendo aptos para disfrutar de la actividad.
La matronatación genera un fuerte lazo de unión que ayuda a reforzar el vínculo entre padres e hijos. Es un momento íntimo en el cual se intercambian, sonrisas, caricias, abrazos y besos. Los beneficios que nos aporta esta actividad son numerosos:
- Refuerza y fortalece el sistema cardiorrespiratorio
- Estimula el desarrollo psicomotor (facilitando el equilibrio, capacidad perceptiva, equilibrio)
- Favorece la autonomía del bebé en el agua
- Favorece el desarrollo del lenguaje
- Estimula el desarrollo psicosocial en un ambiente lúdico y arropado por los padres.
Todas las actividades que realizamos con los peques en el agua son lúdicas con el fin de que se familiaricen, se adapten y disfruten en el medio acuático con sus seres queridos. Con el tiempo los bebés aprenderán a desplazarse, flotar, sumergirse, y habilidades básicas relacionadas con su temprana edad.
DAIANA PAOLA ROMANO
Técnico especialista en Matronatación