La música en el embarazo tiene múltiples beneficios para la madre y para el bebé. En la madre, como en cualquier persona la música agradable es capaz de liberar endorfinas que hacen que nos sintamos mejor; además de activar las neuronas del cerebro del feto, favoreciendo su desarrollo neurológico.
Se sabe que el bebé es capaz de captar los sonidos desde la semana 20 de gestación, es por eso que decimos a las mamás que es bueno que hablen a sus pequeños, ya que éstos son capaces de percibir el tono de la voz, la musicalidad, el sentimiento. Además los fetos pueden escuchar otro tipo de sonidos, como la música.
De hecho, se piensa que los bebés son capaces de recordar y reconocer la música o las canciones que les cantaba su madre cuando estaban dentro del vientre materno varios meses después del nacimiento, y esto generalmente les suele tranquilizar mucho.
¿Y qué tipo de música conviene escuchar? Hay varios estudios acerca del efecto de la música en el cerebro del ser humano, y en concreto del bebé. Alguno de ellos apuntaba a la música clásica, en especial Vivaldi y Mozart, ya que tienen ciertas simetrías y ritmos capaces de desarrollar el hemisferio izquierdo del bebé, al igual que el derecho. Se piensa que estas melodías estimulan la creatividad, la motivación, el lenguaje….
En cuanto a las embarazadas, hay algún estudio que dice que la “La música parece tener una influencia particularmente importante en la presión arterial de las embarazadas; es mucho más intensa que en las mujeres no embarazadas”, explican los investigadores.
Hay centros que ofrecen la posibilidad a las embarazadas y a las mamás recientes clases de música prenatal y para bebés.
En las clases de Música prenatal se trabaja:
– Canciones y poemas
– Ejercicios de relajación y de respiración de Pilates, Yoga y Qigong
– Ejercicios de estiramiento, fortalecimiento y coordinación para la espalda
En las clases de música para bebés (de 0 a 2 años).
En estas clases para bebés, la música se entiende como un medio de comunicación que fomenta la interacción entre padres e hijos y fortalece su vínculo. Se trabaja repitiendo y ampliando los temas principales del programa para embarazadas (el despertar, las caricias, los mimos, el contacto corporal, el baño, comer y beber, dormir, el primer cumpleaños…)
La música, el contacto corporal y el juego común crean una atmósfera de confianza, protección y seguridad que ayudan al niño a tolerar y construir relaciones y a descubrir y disfrutar de la experiencia.
En las clases se trabajarán:
– Rituales (canciones y movimientos de bienvenida y despedida)
– Canciones relacionadas con la vida del niño (hábitos diarios, estaciones del año, fenómenos atmosféricos, animales, estados de ánimo…)
– Poemas y juegos de dedos (estimulan partes del cerebro relacionadas con el aprendizaje)
– Descubrimiento libre con la audición de música
– Aspectos musicales (también con la ayuda de pequeña percusión)