Los bebés recién nacidos no necesitan juguetes, ya que sus sentidos son aún inmaduros, y no son capaces de sujetar nada con sus manos.
Sin embargo, la estimulación se puede hacer de muchas maneras:
Al principio, verá borroso y se fijará en objetos que estén aproximadamente a una distancia de 20-35 cm de su cara. El rostro humano le llamará la atención y podrá reconocer el de la madre al cumplir más o menos 1 mes de vida. Así mismo, también mostrará interés por las fotos o dibujos de rostros de tamaño grande.
Al mes de vida, le atraen los diseños con grandes contrastes y los colores brillantes porque son los que mejor ve (blanco, negro y rojo). Ya ha aprendido a apreciar los sonidos y la música suave. Los objetos que se mueven lentamente y producen un sonido suave le resultan mucho más interesantes que los que están fijos y en silencio.
A partir de los tres meses, el bebé descubre cuánto se puede divertir con sus propias manitas, ahora que ya no las tiene cerradas. Se puede chupar los dedos y utilizarlos para agarrar un juguete que le hayan colocado entre ellas.
Comienza a intentar alcanzar él mismo los juguetes. Luego aprende a pasar un juguete de una mano a la otra y a rotar la muñeca para inspeccionar su mano por todos los lados, generalmente, antes de llevarla a su boca.
Ya que se lleva todo a la boca es importante que te cerciores de que los juguetes están homologados y se corresponden a su edad (que no tenga piezas pequeñas con las que se pueda atragantar)
Cuando tenga 6 meses, probablemente ya sea capaz de sentarse, lo que le permitirá tener una nueva perspectiva de la vida y lo convertirá en el centro de su propio mundo, ruidoso, colorido y cambiante.
Los juguetes más adecuados para los bebés serían los siguientes:
• Sonajeros: A los bebés les encanta hacer ruido. Los bebés a esta edad generalmente adoran la música y están aprendiendo a percibir el ritmo.
• Espejo irrompible: Aunque aún no se dan cuenta de que están mirándose a sí mismos, los bebés quedan fascinados al ver reflejada su imagen. Y a la edad de 3 meses, tal vez tu bebé ya haya entablado una relación con su propia imagen y haya comenzado a sonreírle.
• Mordedores: no hay nada mejor que mordisquear un aro de plástico blando cuando duelen las encías. Puedes guardar estos juguetes en la nevera para darle alivio fresco a tu bebé cuando lo necesite.
• Gimnasio para bebés: Consiste básicamente en un arco que viene equipado con juguetes colgantes o del cual puedes colgar los juguetes que tú quieras. Si bien es sólo para cuando el bebé todavía se encuentra en posición horizontal, por lo cual no lo usará durante mucho tiempo, puede hacerle la vida más interesante durante ese periodo.
• Móviles: Los móviles pueden agregar una nueva dimensión a la visión horizontal del mundo que tiene el bebé. Busca los que tengan grandes contrastes de colores y diseños. A muchos bebés les gustan especialmente los juguetes con música. Cuélgalos en la barandilla de la cuna. Los niños de esta edad miran hacia la derecha el 80%, de modo que un juguete puesto por encima de la cabeza o a la izquierda tendrá un valor limitado en este momento. Por seguridad, mantén el juguete fuera del alcance del bebé.
• Libros blandos con grandes contrastes: Los libros blandos con diseños o decoraciones fáciles de ver están especialmente diseñados para bebés. Recuéstate a su lado para que pueda ver cómo pasas las hojas a medida que le lees en voz alta: vale la pena leerle incluso a esta edad.
• Juguetes sensoriales: Los juguetes blandos que vibran o suenan al apretarlos divertirán a tu bebé durante muchos meses. Los sonidos también lo ayudarán a darse cuenta de qué es lo que está haciendo su mano. Además les ayudarán a entender la causa-efecto.