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A la hora de hacer ejercicio, es fundamental hidratarnos correctamente. En los últimos años, qué duda cabe de que el deporte se ha puesto de moda. Es una buena noticia, ya que a través de él logramos sentirnos mejor y llevar una vida más saludable. Encontrarnos bien nos ayuda a activarnos y a tener más ganas de hacer cosas, de disfrutar de la vida.
Hay quien se apunta al gimnasio. O quien sale a hacer running. También quien prefiere la natación. O salir a montar en bicicleta. Los deportes de equipo también son una buena opción para, además de practicar ejercicio, pasar tiempo de calidad con amigos. Cualquier variante sirve para ponernos a tono y mejorar nuestra salud.
Hidratación en la práctica del deporte
Pero es importante mantenernos hidratados. Durante el ejercicio, nuestro cuerpo al transpirar pierde líquidos. Para recuperarlos, es indispensable beber agua, manteniéndonos así correctamente hidratados todos nuestros tejidos y órganos y que estos sigan funcionando de manera adecuada.
Normalmente, la cantidad recomendada de agua para un adulto es de dos litros diarios o el equivalente a ocho vasos al día, según la sugerencia de la Organización Mundial de la Salud. Pero en esa recomendación también hay que tener en cuenta factores como la edad, el género, el peso, el clima, la humedad o, precisamente, si estamos desarrollando algún tipo de actividad física intensa. Por eso, cuando hacemos deporte, la cantidad de agua a ingerir debe ser mayor que la habitual.
Por qué es importante hidratarse cuando se realiza ejercicio
Si vamos a hacer un ejercicio físico intenso, por ejemplo, correr durante una hora, deberíamos beber 500 mililitros de agua dos horas antes de practicar ese deporte. Beber agua cada quince o veinte minutos durante el ejercicio también nos ayudará a mantenernos bien hidratados. Y, por supuesto, una vez finalizado, es recomendable volver a reponer líquidos bebiendo una buena cantidad de agua, en torno también al medio litro.
El agua es una de nuestras grandes aliadas a la hora de prevenir, por ejemplo, los golpes de calor al realizar una actividad física. Ya sea antes, durante o después del deporte, hidratar nuestro cuerpo es fundamental. Es así porque el agua contribuye a mantener las funciones físicas y cognitivas normales. Por esa razón se recomienda el consumo de dos litros de agua al día.
Bezoya recomienda una dieta variada y equilibrada y un estilo de vida saludable.
*Información revisada y respaldada por nuestro equipo de expertos en Nutrición y Salud.
